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lunes, 19 de septiembre de 2011

Algunos pendientes..

Debo aclarar que no hay educación posible sin ayuda de la familia quien es base fundamental en el proceso aprendizaje del niño y del adolescente, pues es la familia quien lo forja,  lo educa, quien le otorga las herramientas para vincularse en sociedad. 
Docente y familia trabajan juntos y si esta relación no se lleva a cabo, no hay cambio posible por más arte, más convivencia,más respeto e intercambio, es trascendental la ayuda, la guía, la preocupación de la familia.
Tomo como guía a los modelos que los hijos tienden a imitar, haciendo referencia a reglas, normas y valores que fomentarán actitudes positivas o negativas.
"Predica con el ejemplo", de nada sirve el ejemplo si no se práctica con la coherencia entre lo que los padres piensan, dicen y hacen.


6 comentarios:

  1. Comparto tus aportes. Adelante Adriana
    Cariños
    Cristina

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  2. De acuerdo Adriana. Sin familia no hay nada y se nota en clase, cuáles son los chiquilines con carencias.

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  3. Hola Adriana:
    Felicitaciones por tu blog. Lo he estado siguiendo aunque el tiempo apremia y aveces es imposible comentar todos los invalorables aportes de los compañeros.
    Estoy totalmente de acuerdo en que debe haber coherencia entre lo que se predica y los actos. También es fundamental que haya coherencia y respeto entre los miembros de una comunidad educativa, muchas veces los acuerdos pedagógicos en teoría son excepcionales y muy efectivos pero a la hora de la verdad son pocos los docentes que los respetan.
    Cordiales saludos
    Adriana

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  4. Estoy de acuerdo contigo, esta todo relacionado,
    " el hábito no hace al monje ". saludos Cynthia

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  5. Muchas gracias a todas por los comentarios, me intención fue aclarar porque siento que en la entrada anterior "Entre Aula y Jaula", me entusiasmé con el comentario de la película y omití algo fundamental como es la familia.
    Saludos y estamos en contacto.

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  6. Realmente es así, y estoy convencida de que el ejemplo que damos y el ser coherentes en nuestros dicursos y vida misma es lo que los alumnos o nuestros hiijos ven. Si hay familia pero no somos creíbles en lo que decimos y luego hacemos, de nada sirve tampoco una familia.
    Saludos

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